Friday, October 26, 2007

La Primavera Regresa/ Spring Returns


El planeta seguía girando en su órbito alrededor del Sol mientras las estaciones obedecían su destino. Los robles se quedaron pelones pero bellos a la vez y listos para pasar un invierno largo, frío y necesario. Alón no podía hacer más que aguantar lo que le pasaba y aunque no le gustara, no le quedaba otra. La tierra alrededor de sus raíces empezó a congelar haciéndole sentir aun más inmóvil y cuando cayó el primer copo de nieve, Alón decidió darse por vencido y dejarse caer dormido.

Por tres meses en seguida sopló el viento, cayeron nevadas pesadas, y las ramas de los robles se doblaron con el peso de la nieve encima. Durante todo esto Alón soñaba con días soleados, con pájaros volando y con gatos cazando insectos en el pasto. El pequeño roble volaba con Chico y corría con el gato, brincaba y daba vueltas en el aire feliz de tener tanta libertad. Pero cuando llegó marzo y la nieve se convertía en lluvia, Alón poco a poco empezó a darse cuenta que todavía estaba en el mismo lugar desde el otoño. Toda esa “libertad” nada más era un sueño.

Suspiró profundo. Ay, qué triste es la vida, pensó.

Llovió mucho en abril y pronto salieron los azafranes y los brotes de las ramas de Alón y de sus padres. Alón hubiese querido sentir alegría por la primavera pero en vez de alegría se puso a pensar ¿qué pasará este año? ¿Vendrá otra hormiga a quitarme mis hojas? ¿Caerá otro pájaro de su nido?

Ya se creía viejo Alón. ¿Qué más le podía ofrecer la vida?

“Vas a ver, Alón, vas a ver,” dijo una pequeña voz.

(Continuará)


Spring Returns

The planet kept on spinning in its orbit around the sun while the seasons obeyed their destiny. The oak trees were now bare but beautiful in their own way and ready for a long, cold and necessary winter. Alon couldn’t do anything but put up with what was happening to him and even though he didn’t like it, he had no alternative. The earth around his roots began to freeze making him feel even more immobile and when the first snowflake fell, Alon decided to give up and let himself fall asleep.

For three solid months the wind blew, heavy snows fell and the oaks’ branches were doubled over with the weight of the snow. During all of this, Alon dreamed about sunny days, about birds flying and cats hunting insects in the grass. The little oak tree flew with Chico and ran with the cat, jumped and spun around in the air happy to have such freedom. But when March came and the snow changed to rain, gradually Alon began to realize that he was still in the same place since autumn. All that “freedom” was just a dream.

He sighed deeply. Oh, how sad life is, he thought.

It rained a lot in April and soon the crocuses appeared and the buds on Alon’s and his parents’ branches. Alon would have liked to be happy because of spring but instead of happiness he began to think, What will happen this year? Will another ant come and cut off my leaves? I wonder if another bird will fall from the nest.

Alon was beginning to think of himself as old. What more could life offer him?

“You’ll see, Alon, you’ll see,” a small voice said.

(To be continued)

Soy Lorena.
10/26/07

No comments: