Monday, August 31, 2009

El Planeta (11)/ The Planet (11)

Entonces Astra decidió contemplar lo que le decía Alejandro y para hacerlo sabía que era necesario ponerse a meditar otra vez. Le costó mucho trabajo al principio calmar sus pensamientos negativos pero se empeñó en el intento y después de unos quinientos mil años logró en sentirse más tranquila.

Poco a poco lo negativo se remplazaba con lo positivo y Astra creció en sabiduría. Se dio cuenta de muchas cosas. Primero se dio cuenta que no era víctima del universo, que era fuerte, lista y que nadie podía quitarle de su lugar como luna del planeta Pleno Verde. Segundo se dio cuenta que los asteroides solamente andaban haciendo lo suyo y en realidad no le hacían ningún daño. Los cráteres en su superficie eran precisamente eso, “cráteres en su superficie” porque no tocaban su esencia. Los asteroides no podían cambiar el amor que Astra traía adentro, esa presencia del Amor en su corazón que siempre ha tenido y que siempre iba a tener. Cuando Astra contemplaba estas cosas, empezó a ver todo distinto. El sol brillaba más fuerte, su planeta ya no tenía aquella nube gris alrededor y ella podía ver las montañas verdes y los bosques y los lagos del planeta. Con estos cambios le llegó la alegría a Astra y otra vez pudo sonreír.

Continuará.

So Astra decided to think about what Alexander was telling her and in order to do that she knew it was necessary to begin to meditate again. It was very hard at the beginning to quiet her negative thoughts but she persisted in doing it and after about five hundred thousand years she succeeded in feeling calmer.

Little by little the negative was replaced by the positive and Astra grew in wisdom. She realized many things. First she realized that she wasn’t a victim of the universe, that she was strong and smart and no one could take away her place as moon of the planet (Holy Green). Next she realized that the asteroids just went around doing their own thing and in reality did her no harm. The craters on her surface were just that, “craters on her surface,” because they did not touch her essence. The asteroids could not change the love that Astra carried inside, that presence of Love in her heart that she always had and would always have. When Astra contemplated these things, she began to see everything differently. The sun shone brighter, her planet no longer had that gray cloud cover and she could see the green mountains and the forests and the lakes of her planet. With these changes joy appeared to Astra and she was able to smile again.

To be continued.

Soy Lorena.
8/31/09

2 comments:

Ges said...

Hola Lorena, me gustó eso de ser lista...

Buena historia!

Saludos

Lorena's Blogbilingüe said...

Gracias, Nera. Me alegra que haya alguien en el universo que lee este blog.

Un abrazo